BIENVENIDOS

...Sirvan estas líneas a modo de homenaje y agradecimiento a cuantos se cruzaron en mi camino y me aportaron alguna porción de esa esencia de la vida, cuyo conjunto hizo y hace que ésta merezca la pena ser transitada, especialmente a aquellos cuya capacidad de disfrutar haciendo disfrutar a otros, admiro, venero y agradezco, cuyo afán por ello les deseo sea devuelto merecidamente día tras día.

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lunes, 15 de agosto de 2011

Sand Painting

martes, 12 de julio de 2011

Una realidad

Hijo, si de verdad quieres algo en esta vida, vas a tener que trabajar por ello. Ahora cállate, van a dar los números de la lotería.

Homer Simpson

domingo, 26 de junio de 2011

PETER FALK ( Colombo)



Nació en Nueva York el 16 de Septiembre de 1927, y creció en Ossining, Nueva York. Cuando tenía 12 años, apareció por primera vez en un escenario en la obra Los piratas de Penzance.

Tras graduarse en el Ossining High School, donde era una estrella del atletismo y delegado de su clase, Falk sirvió como cocinero en la Marina Mercante. Más tarde continuó sus estudios en el Hamilton College en Clinton, Nueva York. Terminó su B.A. en Ciencias Políticas en el New School for Social Research en 1951. Consiguió un Master en Administración Pública en la Universidad de Siracusa en 1953. Después de intentar, sin éxito, conseguir trabajo en la CIA, se convirtió en director de análisis la Agencia Presupuestaria del Estado de Conectica, en Hartford. En su tiempo libre, actuaba con los Mark Twain Maskers en Hartford y estudiaba en el White Barn Theatre en Westport, donde comenzó a considerar la posibilidad de convertirse en actor profesional. En 1956, con 29 años de edad, dejó su trabajo en la Agencia Presupuestaria y se mudó a Greenwich Village para probar suerte en el mundo de la interpretación.

Falk debutó como profesional con la obra Don Juan de Moliere, el 3 de Enero de 1956, en el Fourth Street Theatre, y en la siguiente temporada apareció en la exitosa revisión de The Iceman Cometh, con Jason Robards. Durante los tres años siguientes a Falk no le faltó el trabajo, saltando de un teatro del off-Broadway a otro.

Aunque Falk disfrutaba del éxito sobre los escenarios, un agente teatral le advirtió de que no esperara trabajar demasiado en el cine debido a su ojo de cristal. Había perdido su ojo derecho en manos de los cirujanos debido a un tumor maligno cuando contaba con tan sólo 3 años de edad.

En 1960, Falk dejó Nueva York y se trasladó a Hollywood, donde participó en su primera película, El sindicato del crimen, y fue nominado a un Oscar® como Mejor Actor Secundario. Ese mismo año, fue nominado a un Emmy por interpretar a un drogadicto en The Law and Mr. Jones. La película de Frank Capra Un gangster para un milagro, con Bette Davis y Glenn Ford, le valió a Falk su segunda nominación a los Premios de la Academia en 1961. Y también fue nominado por segunda vez a los premios Emmy por The Dick Powell Show: The Price of Tomatoes, llevándose en esta ocasión el premio a casa.

Después de rechazar varias ofertas de series de televisión, en 1965 Falk accedió a protagonizar The Trials of O’Brien, con la que consiguió la aclamación de la crítica. Pero ha sido su encarnación del inimitable teniente Colombo el le ha hecho más popular y le ha granjeado cuatro premios Emmy. Lo que comenzó como dos telefilmes, Prescription: Murder y Ransom for a Dead Man, se desarrolló como Colombo, una serie de 90 minutos que formaba parte de las tres alternativas de series de misterio de la NBC. Colombo rápidamente escaló hasta el puesto número cinco de las mediciones de Nielsen. Aunque la serie acabó en 1977, se volvió a poner en marcha en 1988 como telefilmes de dos horas y su producción continúa a día de hoy.

En 1971, Falk regresó a los escenarios de Broadway con la obra de Neil Simon The Prisoner of Second Avenue, dirigida por Mike Nichols, por la que recibió un premio Tony. Su relación con Neil Simon continuó con los papeles protagonistas de tres películas: Un cadáver a los postres, con Peter Sellers, Un detective barato, con Stockard Channing y The Sunshine Boys con Woody Allen. Tamién hizo el tour de la obra ganadora del premio Pulitzer de David Mamet Glengarry Glen Ross, con Joe Mantegna.

La carrera de Falk incluye tres películas inolvidables con su buen amigo John Cassavetes: Una mujer bajo la influencia, con Gena Rowlands, Husbands, con Cassavetes y Ben Gazzara y Mikey and Nicky, que él y Cassavetes protagonizaron para la guionista y directora Elaine May.

La vis cómica de Falk encuetra campo libre en uno de sus trabajos favoritos, Los suegros, con Alan Arkin, y dirigida por Arthur Hiller. En la fantasía de Rob Reiner La princesa prometida, Falks interpreta al abuelo querido. En El cielo sobre Berlín, de Wim Wenders, encarna a un ex-ángel. También ha conseguido el beneplácito del público por sus trabajos en Mi rebelde Cookie, Tune in Tomorrow, Tan lejos, tan cerca, Roommates y Vig.

Falk regresó a los escenarios en 1998 para participar en la nueva obra de Arthur Miller Mr. Peter’s Connections, en el Signature Theatre de Nueva York, con un completo absoluto. En 1999, Falk deleitó al público con una sentida interpretación en el drama A Storm in Summer, dirigido por el veterano director Robert Wise y escrito por Rod Serling. Posteriormente, ese mismo año, participó en el debut en la dirección del actor Joe Mantenga Lakeboat, junto a Mantegna, Andy Garcia, John Turturro y George Wendt. Le siguió un papel en la película sobre la mafia Made, protagonizada por Jon Favreau, Vince Vaughn y Sean ”Puffy” Combs. En primavera del 2000, Falk participó en Los Angeles en la producción de Defiled, junto a Jason Alexander, con la que también consiguió colgar el cartel de completo en el Geffen Playhouse.

En la comedia Corky Romano, Falk comparte cartel con la estrella del Saturday Night Live Chris Catan, y posteriormente ha participado en la miniserie de televisión sobre el clásico El mundo perdido, con Bob Hoskins, y en A Town Without Christmas, con Patricia Heaton, el telefilm de la CBS de mejor audiencia del 2001.

En 2002, Falk participó en la película Invicto, dirigida por Walter Hill y protagonizada por Wesley Snipes y Ving Rhames.

En enero de 2003, se produce el episodio número 69 de Colombo: Columbo Likes theNightlife, emitido en la cadena ABC. En Abril de 2003, el quinto Annual Method Fest Independent Film Festival le honró con el preio del festival en reconocimiento a toda su carrera.

En Wilder Days, una producción de TNT/Johnson & Johnson Spotlight, que se emitió en Octubre de 2003, Falk interpreta al padre de Tim Daly y abuelo de Josh Hutcherson en un viaje por carretera que examina las emociones de tres generaciones de hombres. Retomó el personaje de ángel de A Town Without Christmas cuando protagonizó con Valerie Bertinelli Finding John Christmas. Falk le prestó su voz a Don Brizzi en la película de animación El espantatiburones y poco después recibió el premio en reconocimiento a su carrera profesional en los premios David Di Donatello en Italia. En 2004 protagonizó Checking Out, la versión cinematográfica de la obra ganadora del premio Tony, y también encarnó por tercera vez al ángel Max en el telefilme A Town Without Ornaments. Su siguiente trabajo sería en la película The Thing About My Folks, junto a Paul Reiser. Y también ha participado en Retirement, al lado de George Segal y Rip Torn.

Se despedía del culpable, que respiraba aliviado, se alejaba de la cámara, y en el último momento soltaba aquello de "Solo una cosa más...". Y ahí todos los televidentes sabíamos que el caso estaba resuelto, y que el teniente Colombo -en su versión original, Columbo- había vuelto a triunfar. El jueves Peter Falk, el actor que daba vida al mítico detective, el íntimo amigo de John Cassavetes, el abuelo de La princesa prometida, falleció en su casa de Beverly Hills a los 83 años. Aunque sufría de alzhéimer, en el anuncio realizado por un amigo de la familia no se han especificado las causas de la muerte. Por cierto, Solo una cosa más se convirtió en el título de sus memorias en 2006.

Falk ha sido algo más de un policía con gabardina grasienta -por cierto, era suya-, un Peugeot 403 del 59 y una esposa de la que hablaba a menudo, pero que nunca vimos en la pantalla. Falk fue algo más que Colombo. Que mucha gente solo recuerde su protagonismo en la serie de la pequeña pantalla -personaje que resucitó en diversos telefilmes-, no debería hacer olvidar que este neoyorquino logró dos candidaturas a los Oscar o que trabajó en algunos de las mejores películas de John Cassavetes. Perteneciente a una familia con raíces polacas, húngaras y checas, Falk nació en 1927 en Nueva York. A los tres años tuvieron que extraerle su ojo derecho por culpa de un cáncer y usó de por vida uno de cristal. Aún así, apasionado de los deportes, compitió en atletismo, béisbol y baloncesto, y aunque participó en las típicas funciones escolares, cuando acabó el instituto intentó alistarse en la Armada en 1945. Rechazado por su ojo de cristal, acabó de cocinero en la marina mercante. Después de año y medio enrolado, acabó harto de agua, volvió a estudiar en EE UU, antes de viajar por Europa seis meses. "No sabía qué hacer con mi vida", comentó en su autobiografía. En 1952 retornó a los estudios en la Universidad de Siracusa, donde se graduó en Administración Pública. Intentó entrar en la CIA, donde no le aceptaron por haber pertenecido a un sindicato en su periodo en la marina, y empezó a dedicarse al teatro en una compañía de actores aficionados, y a estudiar en las clases de Eva Le Gallienne.

Le Gallienne fue la primera que se dio cuenta de su talento, intercedió por él ante un par de agentes y le empujó a que dejara su trabajo de contable en Hartford (Connecticut): Falk se mudó a probar suerte en Nueva York en 1956.

En el teatro, Falk prontó logró una gran reputación, y a pesar de que un agente le dijo que no intentara probar suerte en el cine o en la televisión por su ojo de cristal, y que Harry Cohn, el mandamás de Columbia, rechazara contratarle diciendo "Por el mismo precio, tengo un actor con dos ojos", Falk ya fue candidato al Oscar en 1960 por su interpretación del gánster Abe Reles en El sindicato del crimen. Ese mismo año también compitió por el Emmy por la serie The law and Mr. Jones, convirtiéndose en el primer actor seleccionado una misma temporada en ambos premios. En 1961 repitió la jugada: candidato al Oscar por Un gánster para un milagro (la última película de Frank Capra, que dijo que en aquel rodaje solo le alegró la vida Falk) y al Emmy, que ganó, por su aparición en The price of tomatoes, de la serie The Dick Powell show.

Durante los años sesenta, Falk no dejó de trabajar en la televisión y el cine, en películas como La carrera del siglo, El mundo está loco, loco, loco o La batalla de Anzio. En 1969 actuó junto a John Cassavetes en Las Vegas 1970 y cuando este dirigió Maridos, llamó a Falk para que trabajara a sus órdenes. La amistad y la colaboración Cassavetes-Falk volvería a repetirse, con éxito en Una mujer bajo la influencia (donde Falk forma pareja prodigiosa con Gena Rowlands), Mikey y Nicky (actuaron juntos dirigidos por Elaine May), Opening night, Un hombre en apuros y en Columbo: Étude in black. Sí, Cassavetes actuó en uno de los episodios de la mítica serie.

Porque en 1971 Falk aceptó la oferta para encarnar a un detective dicharachero, que ya había aparecido como personaje en series precedentes. Aunque la serie como tal duró hasta 1978, Colombo resucitó en diversos telefilmes de 1989 a 2003. Por cierto, el primer episodio de Colombo lo dirigió un chaval de 25 años llamado Steven Spielberg. "Tuvimos suerte. Yo ya avisé a los productores que aquel chico era demasiado bueno para estar haciendo Colombo".

Gracias al policía, Falk fue candidato 10 veces más a los Emmy (ganó cuatro con Colombo), y a nueve Globos de Oro (solo obtuvo uno). En cambio, por sus fascinantes trabajos con Cassavetes no recibió ningún reconocimiento.

Hasta 2004, cuando dobló a uno de los peces de El espantatiburones, no dejó de trabajar constantemente en filmes como Un cadáver a los postres (1976), Los suegros (1979), Chicas con gancho (1987), en su estupenda doble colaboración con Wim Wenders (El cielo sobre Berlín y ¡Tan lejos, tan cerca!), y sobre todo, como el abuelo que narraba a su nieto (Fred Savage) las aventuras de La princesa prometida. En uno de los mejores diálogos de un título mítico lleno de grandes diálogos, se oía esta conversación: "Abuelo, ya se están besando otra vez", se quejaba el niño. Y él respondía: "Algún día eso no te importará demasiado".

Con su primera esposa, Alyce Mayo, con quien estuvo casado de 1960 a 1976, adoptó dos niñas, Catherine (que acabaría siendo detective privado) y Jackie. Volvió a casarse em 1977, con la actriz Shera Danese, a quien había conocido en el plató de Colombo. En junio de 2009 el intérprete estadounidense quedó bajo la custodia de Danese después de que un juez de Los Ángeles le declarara incapacitado por demencia senil como sentencia a una batalla legal de seis meses entre Danese y Catherine, que aseguraba que no le dejaban ver a su padre... aunque sobre su declaración siempre estuvo la sombra de la sospecha: Catherine ya había demandado a su padre en 1992 por no pagarle la Universidad. En aquella audiencia, uno de los médicos de Falk confirmó que el intérprete neoyorquino padecía demencia avanzada y que había empezado a mostrar señales de demencia senil en 2005. En ese año, antes del avance del Alzhéimer, a Falk le homenajearon en su pequeño pueblo natal, Ossining (Nueva York). Para descubrir la placa que daba su nombre a una calle, Falk tuvo que quitar la prenda que cubría la señal. Y no usaron la típica sábana, sino una gabardina.

En su web aún se pueden ver ejemplos de su gran pasión: la pintura.

Incapacitado desde 2009 debido a la demencia senil y a cargo desde entonces de los cuidados de su esposa, el famoso detective Colombo fallecía la madrugada del 24 de junio a los 83 años de edad.

martes, 21 de junio de 2011

Beso Niño

domingo, 29 de mayo de 2011

DESEOS




Contempla con ojos radiantes el mundo que te rodea, porque los mayores secretos se esconden siempre donde menos se piensa. El que no cree en la magia nunca la encontrará.
- Gustave Flaubert,
escritor francés

domingo, 17 de abril de 2011

Reencuentro

Tanta lágrima y anhelos derramados,
tanta emoción y sensibilidad contenidas;
en mágico vuelo ha llegado vida mía,
nuestro reencuentro tan ansiado.

Deja que mis dulces palabras te arrullen
cual armonioso canto de áureo ruiseñor,
abrazarte hasta que la distancia se derrumbe
en esta inmensa alegría, punto final del dolor.

Deja que mis sentidos recorran tu cuerpo
hasta anidar en tus labios un beso eterno
que deje grabado a puro sentimiento
la incontenible pasión que por ti siento.

Déjame olvidarme del mundo en tus brazos
y que sean historia las grises tardes del hastío.
Sentir tu corazón latiendo junto al mío
y en cada latido decirte ¡Cuánto Te Amo!



Fuente: aquí